Lo afirmó Miguel Calvete, Director Ejecutivo y vocero de la Federación de Supermercados y Asociaciones chinas de la República Argentina, luego de los saqueos ocurridos en el Gran Rosario que arrojaron 65 detenidos (5 de ellos de origen chino) y 4 heridos.
También denunció que fueron maniobras delictivas desestabilizadoras que esconden un oscuro trasfondo político y anunció que se reúnen con las autoridades provinciales para reclamar mayor seguridad.
El ataque más grave ocurrió precisamente en un supermercado oriental de Villa Gobernador Gálvez, donde un comerciante asediado por delincuentes hirió de bala a dos personas. Al respecto, el representante de la entidad que reúne a la mayoría de las asociaciones que agrupan a los propietarios de autoservicios de origen chino repudió los hechos vandálicos así como también las declaraciones del Intendente de esa localidad, Pedro González, quién justificó los saqueos al declarar que “el propietario de uno de los comercios había prometido regalar mercadería”.
El directivo dijo que “se desmiente totalmente esa información porque el comerciante nunca había hecho esa promesa, pero si así hubiese sido tampoco se justifica esa metodología delictiva” y agregó que “es incomprensible que un mandatario municipal avale este tipo de maniobra bajo ese argumento y por eso solicitamos que se lo investigue junto a los detenidos para ver si mantiene algún tipo de relación con los delincuentes que materializaron los saqueos”.
Calvete afirmó que los autores de los hechos no fueron personas de bajos recursos, sino que “hay todo un trasfondo político desestabilizador perpetrado por delincuentes comunes que están vinculados al narcotráfico, a barras bravas, a sectores de la policía de Santa Fe que han sido marginados de la fuerza y a punteros políticos opositores al oficialismo provincial”. En tanto, el directivo anunció que a las 14 hs un representante de la Federación
se reunirá con el Ministro de Seguridad de Santa Fe, Raúl Lamberto, en donde se le va a solicitar formalmente que se amplíe la seguridad en los autoservicios de proximidad en general para garantizar que se pueda llevar a cabo la actividad comercial con normalidad ante este conflicto y que no se derive toda la seguridad de las fuerzas provinciales y nacionales sólo hacia los grandes supermercados como ocurrió en 2012”. “El año pasado hubo 12 comercios saqueados en esa misma zona y hoy el conflicto político y policial que vive Santa Fe podría agravar aún más la situación y eso es lo que queremos evitar” finalizó Calvete.